Las canciones de Amaia

 

Es ella y su preciosa voz que me hacen viajar en el tiempo a distintos momentos de mi memoria. A veces pienso que no sé querer, que me gustaría aprender a querer como ella lo canta: a sentir ese amor bonito al que aspiramos todos y, que sin embargo, muy pocos afortunados alcanzan a conocer en algún momento de su vida.

A veces pienso que Amaia me canta a mí y me cuenta precisamente lo que quiero. Que el amor es un cuento que discurre entre armonías delicadas y equilibradas y que solo está al alcance de un pequeño puñado de personas. Que el amor es música que te hace viajar en el tiempo. Que el amor son los recuerdos y la facultad de conservarlos. Las notas musicales que nos devuelven a una persona durante cinco minutos y permiten que el corazón se nos llene de aire durante lo que tarda en terminar. Que los pulmones se reactiven y sigan absorviendo aire como si nada.

Luego la canción se esfuma y ese amor puro que brota en el pecho se queda roto y destartalado, desmadejado como un ovillo que se cae al suelo, quizá sin querer.

Estoy convencida de que sí el amor existe, es una canción de Amaia.